El padre Angel Montana da la bienvenida a miembros de la Comisión Histórica del Condado Nueces, miembros de la familia y muchas personas más que asistieron a la bendición y presentación de una nueva placa histórica, en conmemoración al artista Antonio E. García afuera de la Iglesia del Sagrado Corazón el 29 de abril.
Mary Cottingham, South Texas Catholic
Los miembros de la Comisión Histórica del Condado Nueces; Anita H. Eisenhauer, Debbie Zuniga, y Carey Rote, Ph.D. fueron los responsables de la dedicación de la Placa Histórica, así como de la elección del sitio en donde la colocaron. Cerca de 100 personas asistieron al evento, incluyendo a las hijas del artista., Ana Davis, y Rose García.
Fresco de Nuestra Señora de Guadalupe en la iglesia del Sagrado Corazón pintado por el artista Antonio E. García en la década de 1940. Mary Cottingham, South Texas Catholic |
Antonio E. García, fue un pintor diestro y sensible que plasmó gran parte de su obra en imágenes santas. Su carrera se expande a lo largo de más de 50 años. El artista dejó su huella en los frescos y murales que le encargaron pintar en varias iglesias y capillas a través del sur de Texas. También dedicó su vida a la educación del arte.
Sus pinturas incluyen al Sagrado Corazón de Jesús e ilustran narraciones de la Santísima Virgen María, ellas se encuentran en las paredes de la Iglesia del Sagrado Corazón de la cual era fiel miembro. Las pintó durante un período de dos años durante la década de 1940.
De acuerdo a su hija Ana Davis, su padre no pintó las piezas religiosas para su vanagloria o ganancia financiera. “Creo que la obra de arte que hizo en las iglesias fue hecha verdaderamente por amor a la Iglesia,” dijo Davis, “a él le importaba hacerlo por amor a Dios.”
Entre las obras de Antonio García, se encuentra un fresco de 44 pies de altura que representa la Inmaculada Concepción de María, que es el favorito de las creaciones de su padre para Davis. El mural de 1960 se encuentra ahora dentro de la capilla de la Escuela Secundaria St. John Paul II.
Aunque Antonio García demostró su habilidad y talento desde el principio, Davis recuerda que la búsqueda por educación superior de su padre no fue del todo exitosa. Estudió en el Instituto de Arte de Chicago, pero no pudo obtener su título porque el programa cambió de tres años a cuatro años y no tenía el dinero para terminar.
Su fresco de 1946 “La Anunciación Mexicana” se encuentra en la Capilla de Nuestra Señora de Loreto en Presidio La Bahía en Goliad. La masacre de Goliad del Coronel James Fannin y sus tropas se produjo en el fuerte español durante la Revolución de Texas en 1836. El sitio se convirtió en un Monumento Histórico Nacional en 1967.
Entre las obras seculares de Antonio García se encuentra “Juneteenth Revue” que pintó en 1939, y es parte de la colección permanente del Museo de Arte del Sur de Texas, y el mural de marzo de 1933 “March on Washington” se encuentra ahora en exhibición, en el Museo histórico del Condado Duval, en San Diego, Texas.
García también dió clases en Del Mar College por mas de 20 años y fue miembro fundador de - South Texas Art League.-
Davis recuerda que cuando era niña, iba todos los veranos a Saltillo, México, donde García enseñaba a dibujar en un parque. A través de su padre, Davis desarrolló una apreciación al arte, la naturaleza y el paisaje, tanto allá como en su ciudad natal Corpus Christi.
Recuerdo, dijo Davis, “que nos llevaba a los T-heads después de misa y bajábamos por el lugar donde esta ahora el Centro de Arte de Corpus Christi, allí veíamos como entraban los barcos. Todavía hago eso hoy en día.”
Mas tarde, Davis estudió arte y tomó clases de historia del arte con uno de los alumnos de su padre.
El Instituto de Artes del Sur de Texas cambió su nombre en 1998, al de Centro de Artes y Educación Antonio E. García, es apoyado en sociedad con la universidad de Texas A&M Corpus Christi. El centro ofrece oportunidades educativas, e incluye un programa extracurricular gratuito, de artes y alfabetización para todos en la comunidad. El centro también ofrece servicios familiares y de orientación.
De acuerdo con un articulo publicado por el periódico Corpus Christi Caller-Times el 25 de abril, la ceguera obligó a García a retirarse durante la década de 1980. Falleció en 1997.
Davis ve la Placa conmemorativa como una señal de que la gente reconoce y aprecia lo que García hizo por la comunidad. Develar la placa significó mucho para ella.
“Siempre supe que mi padre era un gran artista,” dijo Davis, “esta placa me indica que les importó lo que hizo, su trabajo su persona y su vida.”