Yelixa Hernández, miembro del Grupo de Jóvenes Hispanos, ayuda a recoger donaciones durante la Misa en la Iglesia de San Willebrord en Green Bay, Wisconsin. Los hispanos no son “un problema a resolver”, pero son una bendición para la iglesia, dijo un profesor en el análisis de un reciente estudio de la universidad de Boston.
Sam Lucero para Catholic News Service